Entre
familiares, profesoras, alumnos y amigos de la Escuela de Teatro El Alma
Encantada, vimos a fines del año pasado una realidad difícil.
Después de
un año de muchas actividades, con más de 70 alumnos y alumnas en los cuatro
grupos etarios de la escuela, con dos noches especiales de teatro lleno por las
Muestras de Fin de Año, nos deparamos con malas noticias.
La Escuela nació en marzo de 2014 por iniciativa del
Grupo Taller de Teatro Independiente de Cosquín, organización que tiene más de
30 años de historia en la ciudad. Para
su puesta en marcha y funcionamiento, contó con el apoyo de la Municipalidad a través de tres becas, destinadas a sufragar parte de los
gastos de los sueldos docentes de las tres profesoras licenciadas que trabajan en el proyecto.
En
noviembre de 2014, tras ocho meses de funcionamiento a pleno, se quitó el apoyo
de la Municipalidad, dando de baja a las becas sin previo aviso. Amigos,
docentes y alumnos de la Escuela se movilizaron buscando el apoyo de la
comunidad para solicitar la restitución de las becas. Se consiguieron más de
600 firmas de ciudadanos de Cosquín y alrededores, 40 instituciones de la ciudad, como colegios,
clubes, bibliotecas, asociaciones vecinales, etc; y 35 firmas de importantes representantes de la
actividad teatral de la provincia de Córdoba, como La Cochera, Casa Grote,
Documenta Escénicas, Almazenna Teatro, Espacio 351, El Cuenco, docentes de la
Escuela de Teatro de la UNC, entre muchos otros. Las becas nunca fueron
restituidas.
Es sabido que los espacios de educación formal
no alcanzan a cubrir las necesidades educativas de la comunidad. Y que la Escuela de Teatro responde a una demanda
real de los habitantes de la zona; de
otra manera no hubiera sido posible haber contado con 70 alumnos regulares con
un alto nivel de compromiso con su grupo y con la actividad artística en su
primer año de vida.
La UEPC (Unión de Educadores de la Provincia
de Córdoba) ha reconocido la importante labor que viene desarrollando la Escuela,
y la necesidad de sostenerla, valorándola como un espacio necesario que
pertenece al ámbito de la educación no formal, y que da respuesta a muchas de
las necesidades de nuestros niños y jóvenes, tales como contención, expresión,
participación, encuentro e intercambio. Es por ello que decidió ayudar económicamente
con un pequeño aporte para que la Escuela continúe su labor.
También
numerosos artistas ofrecieron donar parte de la recaudación de sus
espectáculos, tanto teatrales como musicales, para sufragar los gastos de la
Escuela. Entre ellos podemos mencionar al Grupo Teatrarte con la obra “La
Malasangre”, al elenco Teatro de Todos, con su obra “Tupac”, Marita Londra y
Jorge Marzili con su espectáculo Umbela, el Grupo Teatro Teatro con las obras “Vocacional
Sampacho” y “Hay que dejarlo jugar”, el Grupo Bocas del tiempo con la obra “Rapsodia
de una noche eterna”. Para ello hemos contado con la colaboración de alumnos y
padres a través de la venta de entradas para estos eventos. También los alumnos
de la Escuela han podido disfrutar del taller de bufones ofrecido de manera
gratuita por el actor Mario Benitez, de la compañía Curtidores de Teatro de
España.
A todos
ellos: ¡Muchas gracias!
De cualquier
forma estamos buscando alternativas que
nos permitan seguir adelante, fortaleciendo nuestros principios de acceso libre
de la comunidad a la práctica del teatro y a sus herramientas de desarrollo
artístico y humano.
La
participación de la comunidad en las actividades generadas en el Teatro es
fundamental para la manutención de la Escuela.
Contamos
con la presencia y el apoyo de los amigos y amigas del Teatro para el
sostenimiento y crecimiento de la Escuela.
Con la
positividad que merece nuestra Escuela por su notorio valor para la comunidad, seguimos
adelante confiados en que este periodo de restricciones es momentáneo y la labor de la Escuela será reconocida.